8.807 cajas familiares se han repartido durante los últimos cuatro días en las comunas de Antofagasta, Mejillones y María Elena como parte del plan “Alimentos para Chile” en la región. Así lo dio a conocer el Intendente Regional, Edgar Blanco Rand, quien valoró la activa participación de las Municipalidades, Fuerzas Armadas, Carabineros, PDI, Bomberos, Defensa Civil y voluntarios de diversas organizaciones.
La autoridad también reiteró su agradecimiento al Consejo Regional por aprobar 2 mil 750 millones de pesos que permitieron financiar la totalidad de las 64 mil 210 canastas destinadas para las nueve comunas y comenzar de esta forma el proceso de entrega antes que la mayor parte del país.
El desglose de las cajas ya entregas hasta hoy son 4.931 en Antofagasta, 2.785 en Mejillones y 1091 en María Elena y Quillagua. Para mañana el operativo se desplaza a las comunas de Taltal y Calama.
Al respecto de la entrega, el alcalde de Mejillones y presidente de la Asociación Regional de Municipalidades de Antofagasta (AMRA), Sergio Vega, expresó: “Queremos agradecer esta gran cruzada de entrega de alimentos. Agradezco al gobierno por esta loable acción. Entregamos casi 3 mil cajas a nuestros vecinos. Agradezco a nuestro intendente y a todo su equipo, seremis, direcciones regionales que han estado en terreno”.
El alcalde de María Elena, Omar Norambuena, por su parte enfatizó que esta ayuda ha sido coordinada en conjunto con funcionarios municipales en pos de auxiliar a las familias más vulnerables de la comuna. “Es un momento importante de agradecer este aporte. Es un primer acercamiento a las familias que más necesitan. Agradezco a funcionarios de gobierno, Carabineros, Fuerzas Armadas… se han hecho las cosas bien y debemos seguir trabajando en conjunto para seguir ganándole a esta pandemia”.
DESPLIEGUE NACIONAL
“Alimentos para Chile” es el nombre de este gran despliegue nacional que se realiza en todo el país y que entregará 2,5 millones de canastas a las familias más vulnerables. La ayuda se entrega directamente en los hogares, sin la necesidad de que los beneficiarios salgan de sus residencias, con la finalidad de poder resguardar al máximo a la población. La canasta incluye legumbres, fideos, aceite, leche, azúcar, tarros en conserva, harina, jabón y detergente, entre otros productos.