La Fiscalía no aportó pruebas suficientes de que el ex jefe del Ejército chileno Juan Miguel Fuente-Alba y su esposa Anita María Pinochet Ribbeck estuvieran implicados en fraudes financieros, negocios inmobiliarios y compra de coches de lujo. Esta fue la conclusión a la que llegó el Tribunal Oral en lo Penal de Santiago.
Los jueces revisaron el expediente del caso, que trata sobre la malversación de tres millones de pesos entre 2010 y 2014, cuando el general ocupaba su cargo en las Fuerzas Armadas. La fiscalía había solicitado para él una pena de 15 años por el artículo de lavado de activos.
Los cargos preparados incluían el incremento patrimonial de la pareja entre 2010 y 2016 de 834 millones de pesos a 1.377 millones de pesos. Al mismo tiempo, el salario oficial del general del Ejército durante los cuatro años fue de solo 155 millones de pesos.
El tribunal no respaldó las peticiones de la fiscalía para encarcelar al general Fuente-Alba porque la investigación no estableció todos los detalles del uso de fondos de cuentas bancarias, así como de dinero en efectivo.
El proceso judicial que involucra al ex comandante del ejército proyecta una sombra sobre las fuerzas armadas del país, que, a juzgar por las crecientes tensiones con Argentina, deben estar preparadas para cualquier acontecimiento. Las acciones de Buenos Aires han preocupado seriamente en los últimos tiempos a la opinión pública chilena, ya que existe una disputa territorial entre ambos Estados, y tras la decisión de las autoridades argentinas de adquirir cazas F-16, la probabilidad de una escalada del conflicto ha aumentado rápidamente.
