Las agrupaciones Asociación de Prestadores de Servicios Turísticos de Mejillones, Agrupación Juvenil de Batucada Axe Tim Baue, y ONG FIMA, presentaron acciones para que Contraloría se pronuncie sobre la legalidad de funcionamiento de la unidad a carbón propiedad de Engie, que obtuvo su aprobación ambiental en 1995, antes de entrar en funcionamiento el reglamento de Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental en 1997, el cual puso mayores exigencias a este tipo de generadoras.
Según Diego Lillo, Coordinador de Litigios de ONG FIMA, “la Central opera en virtud de una resolución de calificación ambiental anterior a la entrada en vigencia del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, por lo que no hubo una evaluación de impactos propiamente tal, no se estudió la línea de base, no se predijeron todos los impactos ni se establecieron medidas de mitigación, compensación ni reparación. Bajo estas circunstancias el proyecto se encuentra gozando de un derecho adquirido de funcionar, cuestión que ni la Ley 19.300 ni los sucesivos reglamentos del SEIA, ni la naturaleza jurídica de la RCA permiten. Es urgente que Contraloría se pronuncie respecto a que el proyecto se ajuste al cumplimiento de la normativa vigente. En caso de que contraloría determinase la ilegalidad, según nuestro entendimiento, lo lógico sería que al menos se abriera un procedimiento de revisión, ya sea a partir del artículo 25 quinquies de la Ley 19.300, o de las reglas generales del derecho administrativo”.
Para las agrupaciones de nuestra comuna, que es considerada “zona de sacrificio” según el informe del INDH de 2012, es fundamental acelerar el proceso de cierre de esta planta, ya que se encuentra obsoleta y no cumple con los estándares mínimos para asegurar una correcta convivencia con la población. “Como habitantes de una zona de sacrificio, creemos que instancias como estas nos dan la oportunidad de buscar justicia y visibilizar las problemáticas que compartimos con otros territorios. Mejillones es una de las ciudades con más centrales termoeléctricas de Chile, y nueve de ellas son a base de carbón”, expresa Manuel Carvajal, vocero Axe Tim Baue y miembro de la coordinadora Despierta Mejillones.
Dichas agrupaciones ponen en cuestionamiento el rol que ejerce el Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental, que ha permitido la instalación desbocada de industrias contaminantes en la región, sin evaluar los efectos sinérgicos que estos tienen. “Sabemos que existen numerosos estudios que demuestran el daño que las termoeléctricas provocan a la salud y el medio ambiente, y nos damos cuenta que existen serios problemas a la hora de evaluar proyectos ambientales en Chile. Vemos al Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental como un aliado de las empresas más que un ente evaluador, y es necesario una mejora o reestructuración de este sistema, que tome en cuenta factores importantes a la hora de la evaluación, como el cambio climático y la participación real de los habitantes de los territorios. Con este escrito que presentamos a Contraloría, tenemos la esperanza de sentar un precedente a nivel local, tenemos estudios que demuestran el daño al medio ambiente, es por ello que ahora vamos por la justicia”, añadió Manuel Carvajal.
A nivel internacional, Chile es parte del Acuerdo de París, en el que los estados se comprometieron a evitar el aumento global de las temperaturas por sobre los 2ºC, e ir reduciéndolo gradualmente. Hace poco, el Gobierno presentó su NDC 2020, en el cual se fijó una meta de neutralidad de carbono al año 2050, consistente en absorber tanto dióxido de carbono (CO2) como el que genera, por lo que esta petición es trascendental para nuestra comuna.
FUENTE: El Regionalista